Indicada: Exceso de piel y grasa, alta distensión de los músculos del abdomen
Anestesia: General
Incisión: Alrededor del ombligo y baja cruz
situada en el pubis
Estancia en la clínica: 2 noches
Recuperación: 10 - 15 días
La abdominoplastia o dermolipectomía abdominal consiste en la eliminación de un segmento de piel y grasa abdominal al mismo tiempo que se restaura la tensión normal de la pared muscular. Indicado para abdómenes distendidos, con cicatrices o estrías.
Frecuentemente se combina con la lipoescultura para aquellos cúmulos de grasa que no disminuyen con la pérdida de peso.
Dicha cirugía siempre deja una cicatriz más o menos larga y visible en función del tamaño y la ubicación de la piel dañada que debe extirparse. Su longitud es predecible antes del procedimiento por lo que el paciente debe estar claramente notificado.
Es necesario descartar los problemas cardiovasculares, pulmonares y de coagulación.
En los pacientes obesos se recomienda, siempre que sea posible, el adelgazamiento previo supervisado por un endocrinólogo.
No tomar aspirinas durante dos semanas antes y no fumar durante las tres semanas precedentes.
Se realiza con anestesia general y su duración es aproximadamente de 2 horas.
El exceso de grasa se elimina mediante la liposucción y los músculos se tensan.
La elección de la técnica depende del tipo de paciente y del tipo de particularidades que presenta cada abdomen. La llamada abdominoplastia con cicatriz reducida consiste en la retirada de segmentos menores de piel y grasa, lo que conlleva una cicatriz menor.
La hospitalización es de 2 noches.
Lo más importante es evitar a toda costa la tensión en la zona de la cicatriz.
Se sentirá dolor. Son normales los morados, edemas, pequeños sangrados e incluso algo de fiebre.
Es importante dormir de espaldas, reposo los dos primeros días y evitar mojar el apósito mientras no se hayan retirado las suturas.
No se realizarán actividades o ejercicios violentos durante ocho semanas.
Se aconseja llevar una faja durante 2 - 4 semanas.
El resultado de la abdominoplastia es casi siempre excelente pero la calidad de la cicatriz depende de la piel y de la magnitud de la intervención.
El resultado definitivo es visible a los 6 - 12 meses.
La cicatriz mejorará pero no desaparecerá completamente.
El resultado seá aún más espectacular si el paciente vigila su peso y tonifica su abdomen.
Los hematomas y los cúmulos de líquido seroso ocupan el primer lugar dentro de las complicaciones de la abdominoplastia, seguidas por el sufrimiento o necrosis de la piel por tabaquismo, compresión o infección.
Las alteraciones y defectos de la cicatriz son las secuelas estéticas más habituales y de más fácil corrección.
Es frecuente que las cicatrices se adhieran por lo que se recomienda la técnica LPG. Con su sistema de succión, esta técnica evita y mejora el queloide (crecimiento exagerado de tejido) y las adherencias de las cicatrices. La hinchazón también mejora al haber mayor riego sanguíneo y oxigenación celular.
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