Rinoplastia

Cirugía plástica de la nariz. La intervención tiene como objetivo cambiar la morfología de la pirámide nasal (parcial o total) o corregir cualquier problema de respiración.

Puede realizarse a partir de los 16 años.

Es una de las operaciones de cirugía plástica que más se practica en todos los países del mundo.

Debe realizarse un estudio cuidadoso de la pirámide nasal y su relación con el resto de la cara y un examen endo-nasal.

Debe llevarse a cabo un chequeo. Cualquier medicamento que contenga aspirina debe evitar tomarse 10 días antes de la operación.

El anestesista realizará una consulta previa.

Se caracteriza, más que por el dolor, por la imposibilidad de respirar durante los primeros días.

La salida de la clínica podrá realizarse en 24 horas.

Se observará hinchazón en los párpados y, en ocasiones, hematomas. Se recomienda descansar y no hacer esfuerzos al día siguiente de la cirugía y se podrá volver a la actividad normal entre los 10 - 20 días posteriores.

Las actividades y deportes violentos deberán evitarse los primeros 3 meses.

Tras la rinoplastia, se sufre un proceso de adaptación de la piel sobre las modificaciones internas que dura aproximadamente 12 meses.

Transcurridos dos o tres meses se tendrá una visión general de los resultados. La apariencia final se obtendrá después de doce meses, siempre dependiendo del paciente. En ocasiones el tiempo es mayor.

Por ello se insiste en tener paciencia para el resultado definitivo y esperar un año como mínimo para decidir hacer algún retoque.

Los resultados de la rinoplastia son definitivos.

Sangrados (normales los primeros días), hematomas, infecciones o cicatrices antiestéticas.